OBJETIVISMO CRISTIANO

 

OBJETIVISMO CRISTIANO

Podríamos decir que es una filosofía que combina la búsqueda de la verdad y la razón del objetivismo, con los principios y valores centrales del cristianismo, como la fe en Dios, la dignidad humana, el amor y la compasión. Entendida esta última como una virtud basada en la justicia, la honestidad y la razón, no como una obligación moral, respetando la autonomía y la libertad individual del que recibe ayuda.

 A continuación, presento las bases ideológicas para una filosofía de este tipo:

 1. *Primacía de la Razón Guiada por la Fe*

   La razón es la facultad principal que los seres humanos deben utilizar para entender el mundo, tomar decisiones y vivir de manera ética. Sin embargo, en esta filosofía, la razón es complementada y guiada por la fe cristiana. La fe no contradice la razón, sino que la eleva y la orienta hacia la verdad divina.
La razón permite discernir la realidad y tomar decisiones informadas, mientras que la fe proporciona el marco moral, y espiritual en el cual esas decisiones deben ser contextualizadas.
Siempre basadas en el reconocimiento del libre albedrio del individuo.

2. *Valor Intrínseco del Individuo*

El individuo es valioso porque es creado a imagen de Dios y tiene una dignidad intrínseca. Cada persona tiene el derecho y la responsabilidad de buscar su felicidad y realización personal, siempre dentro de los límites morales que establece su fe.
El objetivo es integrar la auto-realización personal con el cumplimiento del propósito divino. Se promueve la autonomía y el crecimiento personal, y se reconoce que la verdadera felicidad se encuentra en vivir conforme a los principios cristianos. Basado principalmente en la búsqueda y concreción del ideal personal.

3. *Ética del Egoísmo Racional y Amor al Prójimo*

 El egoísmo racional, reinterpretado dentro de un marco cristiano, significa buscar el propio bien de manera ética, sin explotar o dañar a los demás. Se trata de un egoísmo equilibrado, donde se entiende que el bienestar personal también depende del bienestar de los otros.
 Amar a uno mismo y buscar la propia felicidad no está reñido con el mandato cristiano de amar al prójimo. De hecho, se promueve un equilibrio donde el amor propio y el amor al prójimo se refuercen mutuamente. Basado especialmente en el concepto amar al prójimo como a uno mismo, que le da un marco de equidad y justicia.
El egoísmo racional puede reinterpretarse como la responsabilidad de cada persona de cultivar sus dones, talentos y recursos de manera que no solo promuevan su propio bienestar, sino que también les permitan servir mejor a Dios y a la comunidad. La parábola de los talentos en el Nuevo Testamento, donde los siervos son recompensados por usar sabiamente lo que se les ha dado, puede ser vista como una expresión de este tipo de egoísmo racional. La idea es que, al maximizar nuestro potencial personal y actuar de manera racional, honramos a Dios al cuidar de la vida que se nos ha dado.

En este sentido, el egoísmo racional no es contrario al amor cristiano, sino que lo complementa: uno debe amar y cuidarse a sí mismo para poder amar y cuidar a los demás efectivamente.
El amor al prójimo por otro lado tan poco se ve como un sacrificio de uno mismo, sino como un reconocimiento de que la felicidad y el bienestar de los demás están interrelacionados con los nuestros. Ayudar a los demás, enseñarles a ser autosuficientes y a maximizar su propio potencial es una forma racional y moral de contribuir al bien común sin dejar de honrar la propia dignidad y valor personal. No es algo impuesto, sino que surge del amor desinteresado al prójimo.

4. *Propósito de Vida en la Auto-Realización a través del Ideal Personal.

 El propósito de la vida es la realización plena de los talentos y capacidades que Dios ha dado a cada individuo. Busqueda de ese ideal  tanto en los aspectos físicos, emocionales, intelectuales, sociales y espirituales.
La vida tiene sentido tanto en el crecimiento personal como en la contribución al bien común, orientada por la voluntad divina.

 5. *Moralidad Objetiva Basada en Principios Cristianos*

  La moralidad es objetiva y se fundamenta en los principios cristianos y naturales, que son considerados como verdades universales y eternas. Estos principios se descubren y aplican a través de la razón, que es iluminada por la fe.
 La moralidad no es relativa ni subjetiva, sino que está anclada en los mandamientos y enseñanzas de la fe cristiana, que interpreta el sentido natural de lo creado, y que son vistas a la luz de la razón.

6. *Responsabilidad Personal y Social*

  Cada individuo es responsable de su vida y sus decisiones, tanto en lo personal como en lo social. Esta responsabilidad incluye la obligación de mejorar su propia vida y contribuir positivamente a la comunidad.
La responsabilidad personal es central, pero se reconoce que la vida cristiana implica también un compromiso con los demás, sin otros condicionamientos que el amor y la justicia.

7. *Integración de la Ciencia y la Religión*

Se promueve la integración entre la ciencia y la religión, donde la exploración científica es valorada como una forma de entender la creación de Dios, mientras que la religión ofrece la interpretación moral y espiritual de la existencia.
 La ciencia y la fe no están en conflicto, sino que son diferentes formas de conocer la verdad. La ciencia explica el “cómo” y la fe proporciona el “por qué”.
La ciencia nos ofrece herramientas para entender cómo funciona el universo en términos físicos y observables, mientras que la fe nos ayuda a navegar las preguntas más profundas sobre el significado y el propósito de nuestra existencia. Al reconocer y respetar las diferencias y fortalezas de cada uno, podemos acercarnos a una comprensión más rica y completa del mundo y nuestro lugar en él.

8. *Libertad y Responsabilidad Individual*

La libertad individual es un valor esencial, pero debe ejercerse de manera responsable, respetando los derechos y la dignidad de los demás. La libertad no es un fin en sí mismo, sino un medio para vivir conforme a la verdad y el bien.
La libertad es un don de Dios que debe ser utilizado para buscar la verdad y vivir de acuerdo con los principios morales y espirituales.

9.*Propiedad privada*

El objetivismo cristiano propone una síntesis en la que la propiedad privada es tanto un derecho fundamental como una responsabilidad moral. En este contexto, la propiedad privada es vista como un medio legítimo para que el individuo desarrolle su potencial, pero también como un recurso que debe ser manejado de manera que refleje los valores cristianos de caridad, justicia y solidaridad. Entendiendo esta última como un acto voluntario, racional y basado en el interés mutuo.

CONCLUSION:
La filosofía cristiana objetivista se centra en la armonización de la razón y la fe, la auto-realización personal en el marco de la voluntad divina, y un sentido profundo de responsabilidad tanto hacia uno mismo como hacia la comunidad. Esta filosofía busca integrar lo mejor del objetivismo —la razón, la individualidad, y la ética basada en principios— con lo mejor del cristianismo —la fe, el amor, y la moralidad divina— en una visión coherente y equilibrada de la vida.

Algunas aclaraciones conceptuales:

1. Verdad objetiva: Reconoce la existencia de una realidad objetiva, independiente de la percepción individual.

2. Razón: Valora la razón como herramienta fundamental para entender la realidad y la moralidad.

3. Moralidad absoluta: Establece principios morales universales y absolutos, basados en la naturaleza humana y la voluntad de Dios.

4. Dignidad humana: Afirma la dignidad y el valor inherente de cada persona, creada a imagen de Dios.

5. Fe en Dios: Reconoce la existencia de un Dios personal, creador y sustentador del universo.

6. Amor y compasión: Valora el amor y la compasión como virtudes fundamentales, reflejando el amor de Dios.

7. Integración fe-razón: Busca armonizar la fe y la razón, considerando que ambas son complementarias y esenciales para la comprensión humana.

 

Objetivos de esta corriente filosófica:

1. Promover una visión integral y orgánica del ser humano, combinando la razón y la fe.

2. Defender la moralidad objetiva y absoluta, basada en principios cristianos.

3. Fomentar la búsqueda de la verdad y la sabiduría.

4. Inspirar una vida de virtud, amor y servicio a los demás, basada en el desarrollo individual.

 

Felisindo Rodriguez
Buenos Aires - Agosto 2024